Las aventuras de Paco y Francisco (dos cirujas de Villa Crespo)

EL BOLQUETE

Entra Francisco al bolquete y se encuentra a Paco tomando un té.

P - Buenas tardes
F - Buenas tardes, ¿cómo le va?
P - Muy bien, ¿a usted?
F - Muy bien, gracias.
P - De nada.
F - ¿Cómo dice?
P - No, nada.
F - Algo dijo.
P - Dije de nada solamente.
F - ¿Solamente?
P - Y sí, por lo general se dice de nada después de que alguien dice gracias.
F - Y si dice de nada, ¿por qué dice que no dice nada?
P - No sé, qué se yo...
F - ¿Entonces no sabe lo que dice? ¿Habla porque sí?
P - No, no, es una costumbre, como un cumplido o algo así.
F - ¿Algo así?
P - Sí, ¿qué le pasa?
F - ¿Qué me pasa? ¡¿QUÉ ME PASA?!
P - Sí, ¿qué lo exalta tanto?
F - No, nada.
P - ¿Cómo que nada?, algo lo está exaltando.
F - No sé, que se yo, supongo que me dejé llevar.
P - ¿Y yo me tengo que bancar que usted me trate mal porque se dejó llevar?
F - Yo no lo traté mal.
P - ¡Por favor!, me está gritando desde que me dijo: "gracias".
F - De nada.
P - ¿De nada que cosa?
F - Usted me dijo gracias. Y yo le respondo con un de nada cumplidor.
P - ¡AH, BUENO! ¡¡¡AH, BUENO!!!, ¡¿ENCIMA ME BURLA?!
F - No, no era mi intención
P - ¿Se puede retirar de mi parte del bolquete?
F - Discúlpeme, no era mi intención molestarlo.

Francisco se retira dolido a la parte izquierda del bolquete y quedan los dos sentados a 50 cm uno del otro. Paco sonriendo termina su té de saquito usado.

FIN

No hay comentarios: